Arrestan a 38 de La Luz del Mundo en Michoacán por armas y campamento táctico
La iglesia de La Luz del Mundo volvió a estar en el centro de la controversia luego del arresto de 38 de sus integrantes en el estado de Michoacán, informó la Secretaría de Seguridad Pública local. De los detenidos, 37 son mexicanos y uno estadounidense.
Por Juan Pablo Ojeda
La iglesia de La Luz del Mundo volvió a estar en el centro de la controversia luego del arresto de 38 de sus integrantes en el estado de Michoacán, informó la Secretaría de Seguridad Pública local. De los detenidos, 37 son mexicanos y uno estadounidense.
Según el reporte preliminar, el grupo religioso tenía en su poder un arma corta, 19 réplicas de armas de fuego, armas blancas, equipo táctico y objetos tecnológicos. Las fuentes de seguridad precisaron que los detenidos serían guardias de seguridad entrenados para proteger a los líderes religiosos, templos y eventos masivos de la congregación.
El periodista Arturo Ángel detalló que algunos de los detenidos provenían de Jalisco, Michoacán, Nayarit y el Estado de México, y que afirmaron que su preparación estaba dirigida a un supuesto fin del mundo, justificando la posesión del equipo táctico y las réplicas de armas. Sin embargo, no pudieron acreditar la legalidad del campamento ni la procedencia del material incautado.
El operativo, realizado en Vista Hermosa, contó con la participación de la Guardia Civil, Ejército Mexicano, Guardia Nacional, Fiscalía General del Estado de Michoacán y la Policía Municipal, destacando la magnitud de la intervención ante posibles riesgos de seguridad.
Por otro lado, el líder de la congregación, Naasón Joaquín García, se declaró no culpable el pasado 23 de septiembre por delitos de crimen organizado, tráfico sexual y crímenes financieros. La iglesia emitió un comunicado rechazando las acusaciones, calificándolas como calumnias diseñadas para dañar la reputación de su líder.
En el mismo escrito, se lamentó el arresto de la madre y el sobrino de Naasón, señalando que la fiscalía estaría distorsionando la ley para ejercer presión sobre el líder religioso. La congregación también denunció una presunta colusión entre ciertos medios de comunicación y actores con intereses específicos, que buscan estigmatizar su fe cristiana como peligrosa o criminal.
El caso ha vuelto a colocar a La Luz del Mundo bajo el foco público y judicial, generando debate sobre la línea entre libertad religiosa, seguridad pública y presunto crimen organizado en México.
