Saldo blanco en Feria de Fresnillo 2025 tras operativo histórico
El gobernador David Monreal reportó una reducción del 71% en delitos y cero incidentes de alto impacto durante la feria.

La Feria Nacional de Fresnillo 2025 se convirtió en un laboratorio de seguridad pública que, al menos en esta edición, logró un resultado digno de presumirse: saldo blanco. El gobernador David Monreal Ávila encabezó la Mesa Estatal de Construcción de Paz y Seguridad que informó sobre una disminución del 71% en delitos respecto al año pasado y la ausencia de incidentes de alto impacto, una cifra que, en un municipio golpeado por la violencia, suena casi a milagro.
El operativo no fue menor. Se desplegaron 395 elementos diarios, operativos las 24 horas, con un estado de fuerza que incluyó desde el Ejército Mexicano y la Guardia Nacional hasta policías municipales, estatales, la FRIZ y Protección Civil. En total, 52 unidades resguardaron a más de 309 mil asistentes que entre juegos mecánicos, conciertos y puestos de comida, disfrutaron de una feria que recuperó su vocación familiar.
La estrategia descansó en tres cinturones de seguridad, una especie de muralla invisible que blindó tanto el interior del recinto como las vías de acceso. El mensaje era claro: Fresnillo no sería rehén de la violencia en esta temporada. Incluso quienes solo cruzaban el municipio pudieron percibir un entorno más controlado, casi inédito.
El Secretario de Seguridad, Arturo Medina Mayoral, aseguró que las cifras hablan por sí mismas. Los mil 428 recorridos realizados por los equipos de ocho elementos en distintas áreas —desde estacionamientos hasta zonas de juegos— reforzaron la idea de que la prevención no es una promesa, sino un ejercicio de presencia.
La feria no solo tuvo patrullas y uniformados: también contó con tecnología de punta. Cámaras conectadas al C4, apoyo de los C5 y C5i, drones de corto y largo alcance y hasta helicópteros que patrullaban desde el aire. La seguridad fue omnipresente, aunque discreta. El único ruido fuerte fue el de los fuegos artificiales y no el de las balas.
Los incidentes registrados fueron menores y hasta anecdóticos: 32 detenciones por faltas administrativas como riñas menores, negarse a pagar cuentas o hacer necesidades en lugares indebidos. La Fiscalía confirmó que no se abrieron carpetas por delitos graves, lo que refuerza el carácter histórico del saldo blanco.
El gobernador no perdió la oportunidad de capitalizar el logro. Aseguró que este modelo de seguridad podría convertirse en protocolo permanente para eventos masivos en todo el estado. Y no le falta razón: los resultados evidencian que la coordinación institucional puede ser más fuerte que las divisiones políticas cuando se prioriza la seguridad ciudadana.
En el cierre, el alcalde Javier Torres Rodríguez destacó que Fresnillo dejó de ser noticia por la violencia para convertirse en un referente de estabilidad temporal. Visitantes de seis estados vecinos lo confirmaron con su presencia. Que Zacatecas sea capaz de ofrecer paz, aunque sea en los límites de una feria, resulta un recordatorio de que la esperanza también se construye con operativos, rondines y drones, pero sobre todo con la voluntad política de hacer que la gente viva su cotidianidad sin miedo.